Saga: Chicas de papel y fuego 1/3
Editorial: Puck
Páginas: 416
Sinopsis: En mi tierra, nos conocen como Chicas de Papel. Nos rompemos con facilidad y existimos solo para que otros nos usen y descarten. Pero hay algo que todos olvidan sobre el papel. Es capaz de prender fuego al mundo y hacerlo arder.
Cada año, eligen a ocho chicas hermosas que servirán al rey como Chicas de Papel. Es el más alto honor al que pueden aspirar… y a la vez, el más degradante. Este año hay una novena chica. Y en lugar de papel, está hecha de fuego.
Lei pertenece a la casta de papel, la clase más baja de Ikhara. A pesar de eso, un rumor sobre sus ojos dorados ha despertado la curiosidad del rey; por eso, la apartan de su hogar y la llevan al opulento palacio, una prisión dorada, y su vida queda sometida a los caprichos del Rey Demonio.
Mientras sueña con escapar, Lei comete lo impensable: se enamora.
Su romance prohibido, entretejido con una trama explosiva que amenaza al mismísimo rey, va a obligar a Lei a decidir hasta dónde está dispuesta a llegar en su lucha por la libertad.
Exótica, poética y absolutamente inolvidable, Chicas de papel y de fuego es una historia extraordinaria que nos recuerda que el amor puro y la pasión pueden trascender incluso el destino más desalentador.
Cada año, eligen a ocho chicas hermosas que servirán al rey como Chicas de Papel. Es el más alto honor al que pueden aspirar… y a la vez, el más degradante. Este año hay una novena chica. Y en lugar de papel, está hecha de fuego.
Lei pertenece a la casta de papel, la clase más baja de Ikhara. A pesar de eso, un rumor sobre sus ojos dorados ha despertado la curiosidad del rey; por eso, la apartan de su hogar y la llevan al opulento palacio, una prisión dorada, y su vida queda sometida a los caprichos del Rey Demonio.
Mientras sueña con escapar, Lei comete lo impensable: se enamora.
Su romance prohibido, entretejido con una trama explosiva que amenaza al mismísimo rey, va a obligar a Lei a decidir hasta dónde está dispuesta a llegar en su lucha por la libertad.
Exótica, poética y absolutamente inolvidable, Chicas de papel y de fuego es una historia extraordinaria que nos recuerda que el amor puro y la pasión pueden trascender incluso el destino más desalentador.
Reseña:
Mi lectura con este libro se ha visto interrumpida bastante a menudo y creo que esto ha provocado que me haya costado engancharme.
Lo más interesante que tiene es el mundo que ha creado la autora: está dividido en 3 castas. Las castas de Luna, Acero o Papel en función del grado de animal que tiene cada individuo, donde cuanto más características animales tienes, más arriba en la jerarquía te encuentras. Siendo la casta de Luna la más alta, donde se consideran totalmente demonios con rasgos animales y plenas capacidades demoníacas y la de Papel la más baja en la que no se tiene ninguna característica animal, ningún poder y por lo tanto son completamente humanos. La casta que queda entremedio, la de Acero, son humanos que poseen ciertas cualidades animales tanto en su físico como en sus capacidades.
La historia la narra Lei, una chica de la casta de Papel que se ve sacada a la fuerza de su casa para convertirse en una de las 9 Chicas de Papel que cada año el Rey Demonio (que es un toro) escoge para que sean sus concubinas. A pesar de que Lei no quiere encontrarse en esa situación, también lo ve como una oportunidad para averiguar qué le pasó a su madre cuando se la llevaron en condiciones similares a las de Lei hace ya siete años.
Una vez llega a la ciudad, Lei y a sus compañeras empiezan a recibir clases con el objetivo de que aprendan cómo complacer tanto al rey como a sus futuros maridos una vez finalice su año como Chicas de Papel. Entre clase y clase, Lei empieza a acercarse a sus compañeras y en especial a la dulce Aoki y a Wren, quien esconde algún que otro secreto.
En este primer libro de la trilogía, se da más relevancia a presentar los personajes y a conocer el mundo que ha creado a la autora ya que no es hasta el final del libro que empieza a haber un poco de acción. Pero es precisamente por estos dos puntos que merece la pena el libro. La complejidad de los personajes y su evolución a lo largo del libro realmente es de lo más fascinante.
Aún así, creo que llegados a la mitad del libro, el ritmo se encalla un poco y se hace un pelín lento. Al estar tan centrado en los personajes, la trama principal del libro se ralentiza y cuesta avanzar. Es en ese momento en el que Wren coge más protagonismo y consigue que te vuelvas a interesar en el libro ya que quieres descubrir qué secretos esconde.
El personaje de Wren, creo que merece una mención especial ya que, para mí ha sido de lo mejor del libro. Me ha gustado muchísimo y creo que hubiera estado bien que en algún momento el libro hubiera sido narrado des de su punto de vista.
Cuando se llega al final del libro te engancha completamente y ya es imposible de soltar. No termina con ningún cliffhanger de esos que te entran ganas de prender el libro en llamas pero si que te deja con el gusanillo de querer empezar a leer el segundo.